9/11/09

Propuestas musicales VII
The Wall

El nueve de noviembre de 1989 mi padre y yo estábamos cumpliendo una rutina diaria no escrita: viendo el telediario. Nos acompañaba mi abuela y mi madre iba mientras preparando la cena. A mí me parecía un coñazo eso de ver el parte. Era como un castigo de media hora cotidiano. Índices económicos, política, deportes. ¡Era taaaaaaaaan aburrido! Si en aquellos momentos podría haberme comunicado con aquella niña para decirle que iba a ser periodista algún día, no se lo hubiera creído.

El caso es que aquel día pasó algo sorprendente: el final de la Guerra Fría. En aquella noche el mundo se paralizó frente a los televisores. Vimos en riguroso directo como, mientras una periodista de Televisión Española trataba de hacer una entrevista a los berlineses de la RDA, se abría una portezuela metálica que dejaba pasar a las personas de un lado a otro. Son hechos difícilmente inolvidables incluso para una niña de 14 años recién cumplidos.

El muro del que hablaban Pink Floyd diez años antes de la caída del de Berlín es una pared más simbólica, menos precisa en su localización geográfica que el que separaba las dos alemanias. Es la historia de un ser humano amargado y fracasado por los muros que nos va poniendo la vida por delante. Pero el común de los mortales siempre lo ha asociado con esta noticia. Así que yo no voy a ser menos en este sentido. Sobre todo tratándose de dios, esto, de Pink Floyd. ;-)

Es una Ópera Rock. Lo suyo es que lo escucháramos desde In The Flesh? hasta Goodbye Cruel World y nos deleitáramos poco a poco con las tres partes que tiene la archiconocida Another Brick In The Wall, pero, cosas de internet, aquí todo lo que dura más de cinco minutos, aburre. Os dejo, pues, con esta obra maestra de nuestro tiempo. Y recuerdo que aún existen unos 7.500 km de muros pululando por este mundo nuestro. :-O

4 comentarios:

  1. ¡Pero bueno! ¿Y cómo es que no mencionas en semejante entrada el concierto de The Wall que se montó Roger Waters en Berlín en 1990 como conmemoración de la caída del muro?

    ¡Suspendida en floydianismo! ;)

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  2. Es por purita envidia, Eulez. Es que a mí no me habrían dejado ir pero ni en bromas. Cada vez que veo imágenes de aquel pedazo de concierto se me caen los lagrimones. Peeeeeeeeero, he de decirte que, una vez más, lo vi por la tele. Todavía recuerdo vivamente la imagen de Cydi Lauper. Me figuro que me sorprendería con su indumentaria estrambótica más que con su arte cantando.

    Ay, qué pena más grande.

    (Si quieres que te diga la verdad, trato de saber lo menos posible de los músicos que me gustan. Es que la mayoría suelen ser unos gilipollas del culo para arriba y del culo para abajo. Me decepcionan tanto que muchas veces dejo hasta de escucharlos. Es una manía que tengo. Me quedo con su música, sencillamente).

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  3. Preciosa entrada Cal. Y, créeme, me ha emocionado este vínculo que haces entre el muro de Berlín y la compleja composición sinfónica de Pink Floyd... más bien de Waters (que es el alma máter de la obra).

    Con el tiempo aprendí que lo mejor de los Floyd está en las composiciones anteriores a 1973: Meddle, Ummagumma, Dark side of the moon (¡qué maravilla el "Us and them"), Atom heart Mother...
    Ahora bien, la irrupción en el 79 de esta magnífica obra, The Wall, revaloriza toda la trayectoria, inmensa, de la banda de los Mason, Waters, Gilmour, Wright; la hace más importante, más trascendente. Y es que todo el producto (me refiero al disco) es sencillamente brillante: la producción, las viñetas de Ezrin, los textos, ... el Comfortably Numb.

    Por cierto, Cal: Is there anybody out there?

    Un abrazo.

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  4. Cualquier muro (muros de la vergüenza, quiero decir) es, si me apuras, mucho más complejo que cualquier composición musical. Hasta los contrapuntos de Bach son algo sencillo comparados con las situaciones político-sociales de algunas regiones. Y curiosamente la mayoría de los muros son los mentales. Esos son casi infranquebles.

    Y volviendo a la música, en fin, Pink Floyd. ¡Otro legado de mi padre! Ummagumma es increíble. A ratos se me asemeja a ciertas composiciones de Ligeti (¿Sysypus? ¿Lux Aeterna? lo mismo estoy diciendo una barbaridad). No te sabría decir porqué. Meddle también me gusta. Le tengo menos escuchado, pero me gusta. Dark Side..., ohhhhhhhhh, es mi preferido. Y The Wall también me tiene fascinada. Comfortably Numb está en mi top ten no sólo de canciones de Pink Floyd sino de canciones en general.

    Sí, sí, eso de que hay alguien allá fuera, segurísimo. Vamos, no creo que seamos tan especiales, ¿no, Rogelio? ;-)

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