Es curioso, pero esta canción* tan veraniega que les traigo a mí me recuerda a diciembre, a las navidades más raras de mi vida. Estaba en casa de mis padres, sin mis padres, abarrotada de gente que hasta cierto punto me era ajena pese al grado próximo de consaguinidad.
Me di cuenta por primera vez que estaba sola en el mundo.
No sé si van o vienen, si se cogen las vacaciones ahora o en septiembre o si ya están dispuestos a comenzar el nuevo curso escolar. Este año me quedo sin asueto veraniego, pero pienso sacar tiempo (y pasta) de debajo de las piedras para pasar unos días con mis amigas en cualquier playa de Asturias, para celebrar la octogésima onomástica de mi momi, para ir a Donosti a hincharme de tapas, para disfrutar la salida del Sol en el Barrio de Somorrostro, para ver África desde la lejanía...
Menos mal que todavía no nos cobran por soñar. ;-)
Felices vacaciones. Felices reincorporaciones. Feliz fin de semana.
Cal.
* Más bien es el segundo disco The Drums -Portamento- el que me trae recuerdos navideños, pero no me encajaba con el post de hoy. Sé que sabrán disculpar la licencia poética. ;-)
2/8/13
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)

No me voy, me quedo en un pueblo muy cerca de Madrid.
ResponderEliminarMe da un poquillo de rabia cuando compruebo que hasta la situación tan desesperada en la que estamos, se aparca como si no pasara nada.
Un abrazo
Tampoco me voy a ningún lado, ni siquiera a un pueblito al lado de la capi y la verdad es que no me importa. Solo cambiaría esto por una cosa, bueno, dos: o el mar o un pico de dos mil para arriba.
ResponderEliminarRespecto a lo de aparcar, mpffff, pienso que mucho antes de las vacaciones ya estaba todo parado, alarmantemente parado. No sé como no estamos en plan la carga de los mamelucos enfrente de varios edificios emblemáticos, pero ¡hace tanto calor! (broooma).
Besillos, guapa. Disfruta de tus merecidas vacaciones.
C.