21/11/10

Arcade Fire live in Madrid, 20/Nov/2010

Entre el año 98 y 99 murieron seis padres de los que entonces formábamos una aguerrida pandilla de amigos. El último: el mío. Casi te daba miedo descolgar el teléfono no fuera a ser que... Entre nuestros logros, no sé, yo acabé la carrera. En el 2003 varios de los padres de los integrantes del septeto canadiense (y tejano, que se nos olvida que los hermanos Butler comparten estado con el señor Bush) Arcade Fire también fallecieron. Y así nació Funeral, uno de los más grandes discos que haya parido la esfera musical en la primera década del siglo 21.

Con las entradas en la mano desde el segundo día que ampliaron el aforo del recital, la fecha estaba marcada en mi calendario con rojo brillante. Ya podríamos estar imbuídos en el más absoluto de los apocalipsis que yo iba a estar en Madrid oyendo y viendo a Arcade Fire ayer. Y no me defraudaron. Sí que es cierto que, pese a que la primera vez que los vi fue en festival presentando su segundo largo Neon Bible, me gustaron más entonces. Llenar el Palacio de los Deportes es complicado.

El concierto empezó con "Ready to start", estandarte de su último disco The Suburbs, pero la cosa no empezó a calentarse de veras hasta que los violines, teclados y percusiones de "No Cars Go" hicieron acto de presencia en el escenario haciendo saltar y tararear hasta al más apático de los allí presentes (quince mil almas, ni más ni menos).

Win Butler -guitarra, voz, composición, líder- estuvo parlanchín. Chapurreó en castellano. Nos hizo  corear el oe oe oe futbolero a toda la platea y nos pidió disculpas por el elevado precio de las entradas. Un euro de las mismas será destinado para misiones humanitarias. Supongo que para Kanpe, asociación que fundaron, con la que colaboran y que está plenamente volcada en la ayuda a Haití. Régine Chassagne -guitarra, percusión, acordeón, zanfona, teclados, uff- es de origen haitiano.

Cayeron todos los exitazos de la banda que fueron seguidos fervorosamente por todos nosotros. Nos tenían a sus pies, para qué nos vamos a engañar. Son pura energía. "Laika", "Tunnels", Haïti", "Crown of Love", "Rococo", "Wake Up"... También la que, según palabras propias del mismo Win Butler, es la favorita de la banda "Keep The Car Running". Veintiún temazos. Uno tras otro repartidos en cuerpo principal y pequeño bis. ¡Ay!

Señores, demos la bienvenida a los nuevos reyes del indie que llena estadios de fútbol.

4 comentarios:

  1. Son muy buenos, Cal. Yo los descubri hace menos de un año. Geniales.

    Tu entrada soberbia, as usual.

    Un beso.

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  2. Gracias, Rogelio. Me costó un triunfo escribirla, pero tenía que hacerlo. Esto del blog me lo he autoimpuesto para poder poco a poco recuperarme de mi estado casi catatónico. Así que hay días que una no tiene el horno para bollos.

    Estuvieron muy bien, la verdad. Mira que yo soy una siesa para los conciertos, que estoy más a ver cómo tocan, qué tocan, cómo lo hacen, pero en este (y en el otro que también vi hace unos años; debería recuperar mis antiguos blogs...) me dejé llevar por completo. Es casi imposible no hacerlo. Sólo ver a William B. y a Richard Reed Parry derrochando la energía que derrochan te contagia.

    Ahora ya a esperar a MGMT (que coincide en fecha con Micah P. Hinson, que me chifla y me hace dudar de cambiar las entradas) o, con un poco de suerte, este lunes a ver a Osaka Monaurail que me apetecen un montón en directo. ;-)

    Otro beso para ti, Rogelio.

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  3. ¡Waka! Son mi último descubrimiento, hoy me he puesto Funeral tres veces seguidas. Qué bien, cuánta envidia...

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  4. Yo no recuerdo cómo les conocí... Leo tantas cosas de música y estoy todo el día enchufada a la radio, así que, no sé. Pero les conocí en el 2004, eso sí. Me encantó su disco, NeoGurb. Y el diseño del mismo me pareció tan delicado, tan bonito... Me apasionaron desde el primer momento. Su último disco no es tan bueno como Funeral, plagado de himnos, o Neon Bible, pero también mola. Yo creo que lo que le pasa al último es que tiene demasiadas canciones, que han metido mucha purrela, pero está muy bien, aún así (ya les gustaría a muchos).

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