Kick Ass, el héroe que llevamos dentro.

Estoy completamente desfasada. En este año pseudo sabático he decidido no leer Cahiers du Cinema ni ninguna publicación que hiciera referencia a las pelis del momento. He decidido no ver ni un solo minuto Días de Cine en la tele. He decidido dejarme llevar por la solvente cartelera de los cines de mi pueblo para estar al día en eso que llaman cinefília y que yo tengo, no me cabe duda.

Y así me ha pasado que no me he dado cuenta de un título que tendría que haber llamado mi atención y que sin embargo lo ha hecho cuando ya estaba en formato dvd decorando las paredes de gotelé de un videoclub de barrio: Kick Ass (suena a patada en el culo, pero en jerga yanqui significa algo así como acojonante).

Kick Ass es un cómic y ésta es su adaptación. Nunca lo había leído. Ahora ya está en mi estantería esperando su turno para ser ojeado profundamente.

La película comparte guionista con el cómic. Se nota. (Bueno, he visto el contenido extra y allí me he enterado.) Un género cinematográfico sin concesiones, cruel y sanguinolento que usa la confrontación de los extremos para parir una película hilarante y con un sentido del humor negro como los cojones de un grillo. Seré rara, no sé. Yo me parto cuando Tarantino hace que se le dispare la pipa a Vincent al pillar un bache con el coche y se llenen todos los cristales y la tapicería de los sesos desperdigados de la víctima en Pulp Fiction... Así que también me muero de risa cuando un padre dispara a su pequeña e inocente hija para probar la onda expansiva de cierto calibre. También me río cuando un chalado vestido de súper héroe salta de un rascacielos neoyorquino creyendo que las alas le permitirán volar. También me carcajeo cuando a un pobre insensato que compra un disfraz de héroe en eBay y va dos días a la semana al gimnasio cree que va a poder retener a dos cacos apoderándose de un coche.

Muestra además, entre otras cosas, de lo acelerado que es nuestro mundo 2.0 en el cual pasa algo ahora y dentro de tres minutos ya se sabe en Nueva Zelanda.

No os engañéis. Kick Ass será una película adaptada de un cómic cuya portada nos enseñan los ojazos de dos inocentes criaturas, pero no es una peli para niños.

Recomendadísima para bizarros y gente sin prejuicios políticamente correctos.