Estoy poco escritora. Supongo que el hecho de que llevemos tantísimos días con lluvias y cielos cubiertos (¡con lo que me gustan!) me invita más a quedarme mirando por la ventana (chafardeando a los vecinos), taza de café en mano (en ocasiones mataría por un pitillo) y buena música en el estudio que a estar activa.
Pero no puedo dejar pasar el cuarenta aniversario del disco que siempre, siempre, siempre aparece en mi Top 5 (en el que a veces, no puedo evitarlo, hay alguno más de cinco).
Poco hay que decir de él y si quieren más información no tienen más que teclear The Dark Side of the Moon en cualquier buscador y les saldrán miles de entrevistas, críticas, directos, covers y tabulaciones de guitarra entre otras (inicio egotrip en mi otro blog, el profesional, he garabateado párrafos con las pesquisas gráficas del mismo fin egotrip).
Les dejo con el video completo de la obra porque escuchar una Ópera Rock o como lo quieran denominar a trozos es un PE-CA-DO-MOR-TAL por el que vas al Infierno directamente sin derecho a ningún Limbo ni Purgatorio ni, por supuesto, perdón divino, y me retiro a mis aposentos a vegetar cual gato hecho una rosquilla sobre sí mismo hasta que aparezca un rayo de Sol que se sostenga más de cinco minutos seguidos (¡con lo poco que me gusta el Sol!).
See you on the dark side of the Moon, bloggers!
(*) Sí, queridos lectores, sé que la anterior propuesta musical que les hice, con la cual me comprometía a no hablar never and ever, es la número treinta y seis; pero este es mi blog y si me apetece saltarme los números treinta y siete, ocho y nueve, pues lo hago y aquí paz y mañana gloria. Licencia poética, ea.
¡Discazo! Lo de no trocearlo es el argumento que Pink Floyd para no poner el disco en Spotify... lo cual es una chorrada porque el disco está en iTunes troceadísimo...
ResponderEliminarAnda, sí, que tú eres más hooligan-fan que yo de los Pink Floyd, Eulez. :-D
ResponderEliminarA mí me parece cojonudo lo de no aparecer en el spoti (y eso que estoy tan enganchada al spoti que ni me levanto a buscar los cedés para pincharlos, aunque los tenga). Lo mismo hacen los Arcade Fire y olé. Lo que es ridículo es la excusa, think so!
A ver si les da por hacer una nueva gira. Ay, sí, sí, ¡san Judas Tadeo que se reúnan -los que aún viven- y les podamos ver una vez más! Babeo solo de pensarlo.
Hale, tú con tus matraces y yo con mis tipografías. Besos para ti, Julia y para el aliencillo. ;-)