8/6/05

El octavo rugido de la Bestia Parda


Como buen Géminis que es el señor Floyd muestra dos caras diferentes a todo aquel que quiera conocerle. Hoy hace ocho años que llegó al mundo este pelirrojo incorregible allá en la capital de Hungría y nunca sabré si en Buda o en Pest. Tampoco sabré nunca la cantidad de hermanos que tuvo, si fue el único macho entre muchas hembras o uno más de tantos. Sólo sé de sus orígenes que su madre se llamaba Flora y su padre Rocky, pentacampeón del mundo en belleza de su raza. Como veis el señor Floyd es digno hijo de su madre. Y de su abuelo que lo llamaban Crazy.

El señor Floyd llegó a la Quinta de los Sustos un 10 de Septiembre de 1.997 con apenas tres meses de edad. Yo estaba eufórica porque el día anterior había estado en un macro concierto de U2 en Madrid (en las primeras filas, ahí, pasando calorcito), pero además había recibido la llamada al móvil (todavía conservo el mismo número, increíble, ¿no?) de la perrera diciéndome que el enano ya estaba en España. Yo hubiera dado lo que fuera por traérmelo en el Talgo desde Madrid, pero no me dejaban. Estaba en cuarentena. Uno de los cachorros había muerto en el trayecto Budapest-Madrid y tenían que hacerle la autopsia o no sé qué historias.

Cuando fui a por él a la perrera casi me echo a llorar de la emoción: una cosita esquelética y con las uñas muy largas, todo orejas y patas, con cara de tristón esperaba a que le abrazase y le diese todos los mimos del mundo. O no. El señor Floyd, pidiendo a gritos una caricia, se resistía a venir conmigo. Bromeando con la señora de la tienda le dije: “es que no sé húngaro”. Al final el pelirrojo vino a mis brazos y lo llevé hasta la Quinta arropado en mi regazo porque no quería andar por la calle (el muy finolis).

Mi padre y yo teníamos una lista de nombres para llamar al cachorrillo. Llevábamos mucho tiempo esperando a que el nene hiciera acto de presencia: Lord, Romy, King, todos muy típicos, ya lo sé. Y más para un can de caza que, como sabéis, tiene que llevar un nombre corto y potente. No hacía caso a ninguno. El enano se metió debajo de las piernas de mi padre en el salón, nos hizo un mohín y dijo que esos nombres no le gustaban. Yo miré su pedigree y vi que se llamaba Akebono. Lo llamamos así y nada. Pero, ay cuando dijimos el apellido, se puso como loco, como que ya lo conociera. Y así es como se quedó con Flöyd, un nombre que a priori no me gustaba porque me sonaba a loción after shave de baratillo. Pero ahora no puedo denominarle de otra manera: Floyd tiene cara de Flöyd y punto.

Durante estos ocho años hemos vivido un montón de aventuras. Algunas graciosas, otras, uff, con unas ganas de matarle me he quedado más de dos y tres y cuatro veces. Porque Flöyd es un mimoso incorregible, parece un gato, te mete el morro entre la piernas y empieza a acariciarse a lo tonto para que le hagas carantoñas. Pero cuando no quiere carantoñas el tío coge las de Villadiego y si te he visto no me acuerdo. En ese momento está como una tapia y no oye a nadie. Se pira y va a hacer una de las cosas que más le gustan del mundo: ladrar a tooooooodos los coches que se encuentre. Y, vale, vive en un pueblo, pero mi pueblo no es un pueblo precisamente como el de los padres de Paquete, vamos, que tiene varios miles de habitantes. Mi padre, que le acostumbró a subir al coche y claro, desde que él no está, nadie le lleva en coche y el señor Flöyd necesita su ración de automóvil diaria...

Podría contar mil anécdotas de mi chiquitín. Cada día de su vida ha sido una. Y creo que hoy por hoy todavía no existe ser vivo que más me haya hecho sentir lo que él (sin contar a mis seres humanos allegados): le quiero, le adoro, le echo de menos porque mi madre no me le deja traer a los madriles (ella también le quiere y dice que es suyo, mentirosa, fue el regalo de mi 22 cumpleaños querida mamá)... Podría abrir un blog sólo para él y relatar en él todas sus perrerías... Pero por hoy ya es suficiente. Hoy es su día, su cumpleaños, así que creo que sobran las palabras: ¡¡¡¡FELICIDADES ENANILLO!!!

Y para vosotros muchos besitos.
Calamity.

P.D.: Si queréis ver más fotos del enano, esperad un poquito, quizá esta tarde pueda colgar alguna más...

ACTUALIZACIÓN, 17:33 horas 
Lo prometido es deuda. He tenido un poco de tiempo así que aquí os dejo con más fotos de Floyd.