9/10/08

Chocolate

Cuando consiga leer un libro entero en el metro -transporte público- sin distraerme, me iré de Madrid.
Siempre me he dicho a mí misma que si alguna vez me pasaba esto que he escrito aquí arriba, tendría que haber algún cambio en mi vida. De igual manera que en la película Chocolat de Lasse Hallström sólo que al personaje interpretado por Juliette Binoche le daba por chapar el chiringo e irse con sus bombones a otra parte cuando el aire cambiaba de orientación.

Pues llevo ya un buen tiempo leyendo en el metro sin inmutarme de quien va a mi lado. Rara es la vez que me despista alguien de mi lectura (o de mi profundo sueño). Y lo mismo me pasa en el trabajo: voy con piloto automático.
- ¿Ah, que quieres un burro rosa volando sobre el eslogan del anuncio? - Pues sí, mujer.  ¿Tú no lo ves así? - Sí, sí. Con un burro rosa volando la publicidad queda fetén (uff, nunca diré que lo hice yo).
Así que lo mismo doy un giro a mi vida y me largo de aquí, de mi trabajo, de mi vida... (o lo mismo no, who knows?).

6 comentarios:

  1. Es la sexta vez que la leo. No sé muy bien si estás triste o si estás pasotilla (que igual es otra forma de estar triste). Pero me extrañaría que te hubieras quedado sin ojos para ver, sin oídos para escuchar y sin buen gusto...

    Igual te toca perderte un rato contigo misma. Ánimo, suerte y un par de besos para el camino :-)

    ResponderEliminar
  2. Mi almohada dice que estoy bloquedada, Servidora. Yo creo que estoy más bien pasotilla que triste. :)

    ¿Sabes lo que pasa? Que en curro ya no pinto nada, no se suele tener en cuenta mi opinión, así que paso. Y de Madrid, pues, en fin, estoy un poco cansada. Me gusta, es cierto, pero estoy cansada. Una vez que dejo de aprender -en cualquier sitio- me aburro. Y el aburrimiento es matador.

    Bueno, es muy largo de explicar. Ya tuve el año pasado (justo el 23 de Noviembre hará un año) un rato de casi cuatro meses conmigo misma. No me sirvió para nada. En cualquier caso, muchas gracias, Servidora.

    Mil besos para ti.
    Cal.

    ResponderEliminar
  3. Pues entonces... ¡adelante, hombre del seiecientos, la carretera nacional es tuya! ;-) :-)

    Suerte :-)

    ResponderEliminar
  4. : )
    Pues si ya has dejado de aprender de Madrid (co-sa-que-du-do...), empieza a enseñárnoslo a los demás, mujer. Sé generosa.

    Y cúidate.

    ResponderEliminar
  5. Oye, pues es una buena opción, jatetú. Me voy a hacer una guía en plan Le Cool, pero cencerril, de Madrid. ¡Gracias, Portorosa!

    Dice una de mis dos almohadas que sufro diletantismo, esto es, siempre estoy emprendiendo nuevas tareas que al final nunca concluyo. Bueno, pues espero, al menos, empezar esta.

    Un beso bien fuerte. Cal.

    ResponderEliminar