Nada, un aficionado.
Miren, miren:
Después
Y aún me queda llamar al ayuntamiento porque aquí sólo va parte del papel y el plástico. En fin, que no me aburro, ¡ea! (porque todo esto lo tengo que hacer a escondidillas que, si se entera la doña, le encuentra así a bote pronto una utilidad bárbara).
Pásenme un buen fin de semana.
Cal.
Tómalo como una limpieza general.
ResponderEliminarSi te fijas un poco, todos tenemos la manía de guardar cientos de cosas inservibles.
Un abrazo
Sí, si a mí me encantan estos días. Yo les llamo mis días fansuei. Y después de tirar absolutamente todo lo que parece molestar, siempre digo que la casa parece que flota. Según la liviandad que me aporta una casa me gustará más o menos. La casa de mis padres es para mí como caminar por Júpiter. Pero poco a poco irá recuperando su liviandad (eso espero).
ResponderEliminarBesotes, Luna.
Cal.
Es cierto! Debería ser el síndrome anti-Diógenes.
ResponderEliminarLa luna la tengo muy liviana y con pocas cosas.
ResponderEliminarcuando me sobra algo, lo tiro a Jupiter.
Me monta cada bronca...
Preciosa: pásate por el blog de Nán y apúntate a los cuentos y al parvulario de verano. Lo pásamos muy bien.
Besitos
Hola Nán. Qué ilusión verte por aquí (yo me paso por tu blog también; he encargado vuestro camarote aquí en una de las librerías del pueblo para leérmelo. ¡Ganitas tengo ya!). Supongo que son falacias lingüísticas o como quiera que se llamen. Ironías del médico de turno. Hum. Besote.
ResponderEliminarJúpiter es que el pobre tiene ya esa gravedad tan absorbente que no me extraña que se encabrone, Luna. Me paso habitualmente por el blog de Nán (no sabía que tú estabas en el taller de cuentos). Él también me invitó en su momento (¡gracias Nán!) a participar, pero mis circunstancias actuales no me dejan mucho tiempo... :-| A ver si me centro un poco más y, bueno, no estaría mal retomar la escritura como vicio... Lo que pasa es que hay un nivelazo que me da miedo. :-O Besote para ti también.
Buenos días:
ResponderEliminarCal, no pertenezco al taller.
Sería una locura por mi parte. No sé escribir ni medio bien. Al primer día me pondrían en la calle y con razón. jajaj
Besitos
Bueno, no sé si sabrás escribir o no, pero tus comentarios (aquí y en las bitácoras en las que nos encontramos) destilan inteligencia. :-)
ResponderEliminarBeso bien fuerte.
C.
No es la inteligencia, son los años que tengo encima.
ResponderEliminarvoy camino de la centena y eso hace mucho.
Besos
Pues cualquiera me lo diría, lo de la centena (exagerada, ¿no?). Si está claro que la juventud se lleva en la cabeza. :-) Tengo amigos de mi edad infinitamente más viejos que algún abuelo por ahí. Como digo yo en plan coña, hale, a casa a rezar el rosario.
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