23/3/12

Hecha un lío

Estoy que no quepo en mí de gozo: me ofrecieron el pasado finde ser madrina del sobrino de mi muñeco presioso -a efectos también mi sobrino- y no pude por más que dibujar una extensa sonrisa en mi cara cuando me lo propusieron sus padres.

Hete aquí, ¡las obligaciones que conlleva ser madrina de un rorro! A más cuando se me cruza cualquier plan, aflora mi perfeccionismo enfermizo e intento llevarlo todo hacía el diez en lo que sería la puntuación de un examen (nueve con cinco como mínimo). No quiero que el enano tenga unos padrinos como los míos que no sé ni siquiera si están vivos. Mi madrina, en fin, todos conocen -si son seguidores- la historia judicial con mi madrina-exabuela. Con mi padrino las circunstancias no son más halagüeñas: la última vez que le vi, moi iba vestida de blanco, acababa de acoger en mi seno (¡ja!) la hostia consagrada y al poco recibir en las mismas manos mi primera Polaroid como regalo.

Y tengo que contar también que mi vida está dando bandazos para un lado y para otro sin saber muy bien qué dirección tomar. Lo mismo me quedo en Madrid y empiezo a vivir sola y empiezo a despuntar en mi profesión, lo mismo me voy a New York a fotografiar los clubes de Jazz, lo mismo paso la prueba de selección para trabajar en Arabia (soñar es gratis ;-D), lo mismo vuelvo a mi puebluco, lo mismo sigo igual... ¿Qué pasaría si mi escenario vital cambiara de decorado y de personajes?

Y otra circunstancia, ¿qué tipo de educación le podría dar yo a este niño? Miren estoy deseando regalarle una camiseta para bebés de Los Ramones o de Nirvana, for instance. La minimansión parece frikilandia entre muñecos de Mazinger Zeta, la Guerra de las Galaxias, soldados y Barbies. Mis dibujos animados favoritos son Vaca y Pollo y todo aquello que haga Tim Burton en este sentido. Escucho música para cortarse las venas... El negro es mi color... No entro en casa más que para dormir...

Y la ceremonia es católica. Aquí sí que tengo el súper dilema porque, aunque en el coche tenga a San Cristóbal, San José Obrero, la Virgen del Carmen, la medida de la del Pilar y un koala australiano, aunque ponga velas a San Judas Tadeo, aunque visite todas las iglesias/mezquitas/sinagogas/etc. allá donde voy, soy apóstata. Sería ir en contra de mis principios... a mí no me gusta la hipocresía... los padres se van a decepcionar... Dios mío, al final sí que voy a tener que visitar al párroco de mi pueblo a ver qué opina él.

Y ustedes, ¿qué me aconsejan?

Pásenme un buen fin de semana. A mí me toca estudiar, mpfff, lo cual no quiere decir que no nos veamos en los bares. ;)
Calamidad.

5 comentarios:

  1. Pues a mí, lo único que me genera duda es lo ceremonial (yo también soy apóstata y no sé qué haría).

    Yo soy madrina (civil) de una de mis sobrinas, de la pequeña. Ella vive en Santiago y yo en Ferrol (no nos vemos mucho) pero eso no quita que la tenga presente, le compre su mona de pascua y su rosca de Reyes, le pida a los Reyes los mejorcitos regalos para ella y, en su cumple, yo intente que mi regalo sea el supermásmejor.

    Mi madrina vivió en Zaragoza durante mi infancia y para mí era, y sigue siendo, una persona importantísima en mi vida (y nos veíamos únicamente en vacaciones). Pero ella siempre me hizo saber que yo era especial entre los demás, que para ella no era solo una sobrina más, era SU AHIJADA, y eso era fantástico!!

    Yo quiero ser una madrina como ella:
    http://afilladomar.blogspot.com.es/2009/09/madrina.html

    Dale! Adelante!

    ResponderEliminar
  2. Ya, hmmm, es que la ceremonia es católica. Ahí es donde está mi mayor duda porque yo no lo soy, Filla (por cierto, ¡feliz cumpleaños!;D).

    Porque pase lo que pase en mi vida yo seguiré viendo a ese niño y, ufff, soy una tía regalos, ahora no que ando a falta de cash, pero solo por eso.

    Ay, no sé.

    ResponderEliminar
  3. Supongo que quienes te han escogido como madrina te conocen, ¿no? Supongo también, por lo tanto, que ante ellos no tienes que fingir. Y para mí la ceremonia es solo eso, a mí no me preocuparía nada.

    Es una oportunidad para tener una relación especial con un (por ahora) niño. Puede ser algo estupendo.

    Un beso.

    ResponderEliminar
  4. Ah, y ya irás contando qué pasa con tu vida. Con la profesional y con la otra :)

    ResponderEliminar
  5. Uyssss, Portorosa, hoy estoy especialmente filosófica así que te preguntaría ¿qué es conocer a alguien? Porque yo he vivido toda la vida con algunas personas y no han dejado de sorprenderme -para bien y para mal- jamás, sin ir más lejos, mi madre.

    Sí, la hermana y el cuñado de mi muñeco me conocen, pero no sé yo si hasta el punto de confiarme la educación de su hijo por lo que pueda pasar. Aún lo estoy pensando...

    La profesional va así asá, mucho curro poca pasta. Y la otra, mpffff, me voy a poner a escribir el relato del Bremen que es una forma fina de darme mus. ;-)

    Muuuuchos besos.

    ResponderEliminar