Primavera

De repente me ha apetecido escuchar música. Mi cabeza aún se debate entre escoger un disco entre los varios que me tientan con su disfrute.

Es que es curioso, o al menos a mí me llama poderosamente la atención, desde que murió mi momi, no he vuelto a escuchar música, quiero decir, no me he vuelto a interesar por la música (es más, a ratos me molesta bastante el ruido).

Si exceptúo el último disco de los Last Shadow Puppets -que, por cierto, era un regalo-, hace como dos años que no compro nada. Puede parecer una bobada, pero dos de mis bandas favoritas, de las de Top 5, acaban de sacar disco hace apenas un mes y ni me he despeinado.

No sé. Me he levantado (sí, a estas horas y puedo decir con absoluta franqueza que ¡benditas horas! porque hoy me he metido a la cama en el momento en el que ya suelo estar duchada, desayunada y dispuesta a un día más de trabajo, estudio o lo que sea que hago) y, mientras tomaba un café, en vez de leer los blogs de la blogocosa o las noticias de mi sector, me ha picado la curiosidad de saber qué hicieron ayer PJ Harvey y antes de ayer Radiohead (entre otros) en Barcelona.